Intervenciones Parlamentarias de Jorge Fernández

jueves, 21 de junio de 2007

Pleno del Congreso de los Diputados, 20 de junio de 2007

PREGUNTA DEL DIPUTADO DON JORGE FERNÁNDEZ DÍAZ, DEL GRUPO PARLAMENTARIO POPULAR EN EL CONGRESO, QUE FORMULA A LA SEÑORA MINISTRA DE EDUCACIÓN Y CIENCIA: ¿CÓMO VALORA LA PARTICIPACIÓN DE LAS SELECCIONES AUTONÓMICAS, INCLUSO ENFRENTÁNDOSE A SELECCIONES ESPAÑOLAS, EN TORNEOS DEPORTIVOS INTERNACIONALES?

El señor PRESIDENTE: Pregunta a la señora ministra de Educación y Ciencia de don Jorge Fernández Díaz. Adelante, por favor.

El señor FERNÁNDEZ DÍAZ: Señora ministra, con ustedes, el Partido Socialista, en el Gobierno de la nación y en el de la Generalitat de Catalunya ha sucedido lo que nunca hubiera debido suceder, y que está situado a medio camino entre el esperpento y la tragicomedia. Me refiero, como sabe sin duda, a la competición de fútbol sala que enfrentó a las supuestas selecciones nacionales de Cataluña y España en la materia. Ya conocemos toda la casuística del asunto: que no se trataba de una competición oficial, que se trata de asociaciones de fútbol sala sin representación oficial, y también conocemos las gestiones del embajador; pero al final ha sucedido lo que se veía venir: un enfrentamiento deportivo con toda la solemnidad propia de los eventos oficiales internacionales deportivos —uniformidad, himnos, denominación— en este caso enfrentando a Cataluña y a España.
No tengo ninguna duda de que ha habido una clara y manifiesta mala fe en una de las partes —y lo digo claramente—: en la parte catalana, que ha abusado de la ingenuidad, cuando menos, de la otra parte. Basta ver, a modo de ejemplo, a la delegación oficial que acompañaba al equipo catalán, que fue a Siberia por contraposición a la que acompañaba, que era nula, al grupo de amigos, muy orgullosos de formar un equipo de fútbol sala y que supuestamente representaba a la selección española en el mundialito en aquellas tierras.
Junto al esperpento y a la ingenuidad conviven lo serio y lo preocupante. He dicho que se veía venir y así ha sido. La Secretaría General de L’Esport, de la Generalitat de Catalunya, depende del presidente de Esquerra Republicana de Catalunya, que es un partido que no oculta
que es independentista, y que en todo momento ha promovido las selecciones nacionales deportivas catalanas. Eso es conocido y lo sabemos, pero lo grave es que, con
el impulso del señor Rodríguez Zapatero, se aprobó en el Parlamento de Cataluña un Estatuto que reconocía esas selecciones nacionales, y ahora vemos con qué intención. Nosotros ya lo sabíamos y por eso nos oponíamos entonces y ahora. No hay peor ciego, señora ministra, que el que no quiere ver, y dada la estrecha relación existente entre las selecciones deportivas y los
sentimientos nacionales de pertenencia y por supuesto con la idea de soberanía, a nadie debe sorprender que quienes desean la ruptura de España vean en este ámbito de actuación, el deportivo, un terreno abonado para avanzar en sus proyectos si el Gobierno de España y el partido que gobierna en España y en Cataluña se lo permiten, por acción o por omisión. Por lo menos los partidos nacionalistas y soberanistas a estas alturas ya no engañan a nadie. Ustedes sí. Empieza por decir el señor Rodríguez Zapatero que la nación es un concepto
discutido y discutible, se habla de realidades nacionales y se acaba en Siberia, observando, entre la perplejidad y el sonrojo, que el himno de Cataluña y el himno de España suenan representando a dos realidades nacionales opuestas y enfrentadas entre sí.
¿Qué van a hacer para que no vuelva a suceder un hecho así?

El señor PRESIDENTE: Señora ministra, su turno, por favor.

La señora MINISTRA DE EDUCACIÓN Y CIENCIA (Cabrera Calvo-Sotelo): Muchas gracias,
señor presidente.
Señoría, como no ha tenido usted tiempo de plantear la pregunta, la voy a hacer yo en su nombre: ¿Cómo valora la participación de selecciones autonómicas, incluso enfrentándose a selecciones españolas, en torneos deportivos internacionales?
Pues bien, señoría, este Gobierno no engaña, y ha manifestado de forma rotunda y reiterada que la representación internacional en las competiciones deportivas oficiales la tienen las federaciones españolas. Respetamos y compartimos la actividad de selecciones autonómicas en el ámbito que les corresponde, pero solo las selecciones españolas pueden representar a nuestro país cuando se disputan competiciones de carácter oficial.
Respecto al partido al que usted ha hecho mención, reitero —sé que usted lo sabe— que se produjo en el marco de una competición privada, organizada por una asociación privada e independiente del tejido deportivo español, en la que el combinado de jugadores españoles
que allí participó no representaba evidentemente a España. El Gobierno, como usted sabe porque lo ha mencionado, a través de la embajada de España en Moscú —le recuerdo que la competición se jugó en Yakutia, en Siberia oriental, a más de 6.000 kilómetros de la capital rusa—, hizo las gestiones oportunas para impedir que el citado equipo utilizara los símbolos del
Estado, y le informo asimismo que el Gobierno ha instado a la Abogacía del Estado a que estudie los hechos para determinar si se han cometido infracciones que pudieran dar lugar a las sanciones correspondientes.
Resulta evidente que el Gobierno ha actuado con diligencia, con la eficacia que requería la situación; se han tomado las medidas oportunas para evitar que un equipo que no esté reconocido ni por la Real Federación Española de Fútbol ni por la UEFA ni por la FIFA ni cuenta con los permisos de la administración deportiva pueda
representar al deporte español. Como he dicho al principio, no hay duda respecto a la posición del Gobierno. El Gobierno no engaña, le repito, y resulta reiterativo y un tanto cansino abrir otra vez este debate, que está absolutamente agotado.
Muchas gracias, señor presidente.

miércoles, 13 de junio de 2007

Teletipo de Servimedia, 12 de junio de 2007

SERVIMEDIA
CUBA. EL PSOE ELOGIA EL "OFICIO" E "IMPROVISACIÓN" DE UN DIPUTADO DEL PP POR SALVAR UNA MOCIÓN SOBRE CUBA

La ausencia de Jorge Moragas obligó a su compañero Fernández Díaz a defender la iniciativa en la tribuna sin conocerla

MADRID, 12 (SERVIMEDIA) El Partido Socialista elogió hoy el "oficio" y la "improvisación" de un diputado del Partido Popular que había evitado que decayese una proposición no de ley de su grupo parlamentario sobre el futuro democrático en Cuba.
El secretario general del Grupo Popular en el Congreso, Jorge Fernández Díaz, se ganó estos piropos de sus adversarios políticos gracias a la ausencia de su compañero Jorge Moragas, que tenía encargado defender una iniciativa sobre la transición cubana y que no se encontraba en el Hemiciclo cuando comenzó el debate.
El presidente de la Cámara Baja, Manuel Marín, llamó por tres veces al Grupo Popular para que uno de sus representantes tomara la palabra pero no obtuvo respuesta porque el secretario de Relaciones Internacionales del PP, Jorge Moragas, no había llegado todavía.
Fernández Díaz reaccionó al vislumbrar que Marín estaba a punto de dar por decaída la cuestión, al no encontrar a ningún diputado popular para su defensa. Entonces, subió a la tribuna y, sin papeles, comenzó a improvisar.
El "número dos" del Grupo Popular en el Congreso pidió al Gobierno que "se dedique a lo que no se ha dedicado" hasta el momento dado que en Cuba "no hay un régimen democrático" y con su actitud a favor del régimen de Fidel Castro "tiene en vilo a muchas personas".
Fernández Díaz, que al inicio de su intervención pidió permiso a Marín para compartir el tiempo con Moragas en el caso de que llegase a tiempo, no paró de mirar hacia la puerta de manera impaciente durante todo el discurso confiado en que su compañero de partido le iba a tomar el relevo. Sin embargo, ese momento no llegó.
Cuando ya terminaba su alocución, otro diputado le acercó el texto de la proposición no de ley para que contara con algún tipo de ayuda. Sin embargó, Fernández Díaz se limitó a recordar que la iniciativa consta de "seis puntos concretos" que todos los diputados pueden leer en el Diario de Sesiones.
Al concluir, no sólo se ganó una sonora ovación de sus diputados por salvar la iniciativa sino que incluso encontró los elogios del Partido Socialista por el "ejercicio de improvisación" y el "oficio parlamentario" demostrado al subir a la tribuna sin papeles y sin conocer con detalle el contenido de la iniciativa planteada por el PP.
El diputado socialista Jordi Pedret transmitió su "felicitación absolutamente sincera" a Fernández Díaz por hablar "coherentemente" de una proposición no de ley que no tenía encomendada.
Sin embargo, el esfuerzo realizado por el secretario general del Grupo Popular en el Congreso sirvió de poco porque la iniciativa fue rechazada de manera mayoritaria con el voto en contra de PSOE, ERC, IU-ICV y Grupo Mixto pese a incorporar una moción conjunta de CiU y PNV. Moragas sí estaba en el Hemiciclo del Congreso en el momento de la votación e incluso pudo escuchar algunas de las intervenciones del resto de los grupos. Sin embargo, llegó tan tarde que no pudo ayudar a su compañero de partido y circunscripción Fernández Díaz.

Pleno del Congreso de los Diputados, 12 de junio de 2007

PROPOSIÓN NO DE LEY DEL GRUPO PARLAMENTARIO POPULAR EN EL CONGRESO, PARA RECUPERAR UNA POLÍTICA DE APOYO A LOS DEFENSORES DE LA DEMOCRACIA, DE LA LIBERTAD Y DE LOS DERECHOS HUMANOS EN CUBA.

El señor PRESIDENTE: Proposición no de ley del Grupo Parlamentario Popular en el Congreso, para recuperar una política de apoyo a los defensores de la democracia, de la libertad y de los derechos humanos en Cuba. Defensa de la proposición no de ley. (Pausa.) Llamo por segunda vez al Grupo Parlamentario Popular para la defensa de la proposición no de ley. (Pausa.) Lo haré por tercera vez. (El señor Fernández Díaz, pide la palabra.) ¿Desea usted defenderla? (Asentimiento.) Tiene la palabra el señor Fernández Díaz, por un turno de siete minutos.

El señor FERNÁNDEZ DÍAZ: Gracias, señor presidente. Subo a la tribuna para defender la proposición no de ley del Grupo Parlamentario Popular, que pretende que el Gobierno de España se dedique a lo que, en nuestra opinión, hasta ahora no se ha dedicado, que es a propiciar una transición democrática en Cuba, teniendo muy presente que en estos momentos, como todos sabemos, vamos a celebrar en España el 30º aniversario de una elecciones democráticas —las del 15 de junio de 1977—, que se convirtieron en elecciones constituyentes y que permitieron después la aprobación de una Constitución por consenso, la Constitución de la reconciliación, y en cuyo régimen democrático estamos ahora desarrollando nuestras actividades.

Nos da la sensación de que Cuba, en ese sentido, tiene un cierto paralelismo con la situación que se vivió en España en las postrimerías del franquismo. En aquel momento, en España, no había un régimen democrático, y es evidente que en Cuba no hay un régimen democrático. Es evidente que hay una persona que gobierna y que asume el poder político en Cuba cuyo estado de salud afecta a la situación política y social de ese país y que tiene de alguna manera en vilo a muchas personas en Cuba y fuera de Cuba, y sería conveniente que se ayudara a los demócratas cubanos y al conjunto de la sociedad cubana a una transición desde un régimen que no es precisamente de libertades, sino absolutamente dictatorial, a una situación plenamente democrática.
El momento que vivimos en España debe hacer reflexionar al Gobierno de España en relación con lo que está haciendo en aquel país. ¿Se imaginan ustedes cómo sería interpretado en la España de 1975, en la España de 1976 o en la España de 1977 que gobiernos de países democráticos con una especial relación histórica con España en aquel momento, en el mejor de los casos, se hubieran lavado las manos, se hubieran mantenido neutrales o cuando no hostiles en relación con aquellos sectores del interior o del exterior del país, del interior o del exterior del régimen, que lo que querían era trabajar y ser ayudados desde el exterior para que se produjera una transición pacífica hacia un régimen de libertades?¿Se imaginan cómo hubiera sido valorado en España que los gobiernos de esos países —insisto— no solo no hubieran apoyado, sino que se hubieran mantenido neutrales y en algunos momentos incluso hostiles en relación con esos sectores sociales y con esas fuerzas políticas?¿Cuál sería la valoración que nos hubiera merecido su actuación y su actitud?

La celebración en esta Cámara pasado mañana del 30º aniversario de unas elecciones democráticas, las del 15 de junio de 1977, debe hacer reflexionar a esta Cámara y al Gobierno. Hagan ustedes el ejercicio de reflexión al que yo les invito. ¿Creen ustedes de verdad que la política que está llevando a cabo el señor Rodríguez Zapatero y que está ejecutando el señor Moratinos es la más adecuada para que en estos momentos, desde el exterior, se cite al Gobierno de Cuba a abrir generosa e inteligentemente las manos para que se propicie una auténtica reconciliación que permita una transición democrática cuando falte quien, por razón aunque solo sea biológica, va a faltar al frente del Gobierno y del poder político en Cuba? Ese es el sentido que tiene nuestra iniciativa; poner de manifiesto que, en nuestra opinión, la política que está llevando a cabo el Gobierno de España al respecto es absolutamente equivocada. Hay muchos sectores cubanos que desean una transición pacífica a la democracia que se sienten desamparados y desalentados viendo cuál está siendo la política del Gobierno de España, que tiene una especial autoridad a efectos de impulsar ese proceso. Dejar de ser como Pilatos lavándose las manos y siendo neutral cuando esa neutralidad significa tomar partido y cuando tiene visos de indiferencia en la práctica para ser beligerante en favor de los derechos humanos, en favor de la libertad, en favor de la transición pacífica a la democracia en Cuba, que estoy seguro que es lo que todos sin duda deseamos. Desde la autoridad que tiene España y su Gobierno, no porque sea este, sino cualquier Gobierno de España, desde nuestra experiencia personal y colectiva hay que ayudar a que esto se pueda producir en un país como Cuba, tan próximo a nuestros sentimientos, a nuestra historia y a nuestra cultura política.

Señor presidente, esta es la iniciativa que yo en estos momentos he defendido en nombre del Grupo Parlamentario Popular y confío fervientemente en que ustedes la apoyen. La proposición no de ley se articula, como ustedes saben, en seis puntos concretos que constan en el Boletín Oficial de las Cortes y, por tanto, no los desarrollo. Sé que se han presentado enmiendas, entre ellas una conjunta del Grupo Catalán y del Grupo Vasco que, si bien de manera distinta, confluyen en el mismo objetivo de conseguir esa rectificación de la política del Gobierno de España en orden a lograr ese objetivo al que antes nos hemos referido. Confío en que teniendo en cuenta la fecha en la que nos encontramos y que de alguna manera estamos haciendo un ejercicio auténtico en este caso de recuperación de nuestra memoria histórica, les ayude a reflexionar, a cambiar de política y a ayudar de verdad a los sectores que desde fuera de Cuba —desde dentro del régimen no puedo decirlo en este caso— están deseando esa ayuda, porque la necesitan para que esa transición se pueda realizar. Muchas gracias. (Aplausos.)

lunes, 11 de junio de 2007

La Vanguardia, 10 de junio de 2007

La Consagración de las Familias al Sagrado Corazón en el Tibidabo.


El pasado domingo, en el Templo del Sagrado Corazón del Tibidabo, se clausuró el Congreso internacional que bajo el lema "Cor Iesu, fons vitae", se celebró en Barcelona. Para el Secretario del evento, Prof. Enrique Martínez, de la Universidad CEU Abad Oliba, se trataba, ante todo, de dar respuesta desde la fe cristiana y la sociedad actual, a la "cultura de la muerte", en denominación acuñada por Juan Pablo II. Esa cultura es la que promueve y justifica el aborto, la contracepción, la clonación, la eutanasia… que, como sabemos, avanza de forma implacable en nuestras sociedades.
En esa solemne clausura, se produjo un hecho destacable como algo extraordinario hoy. El Cardenal De Giorgi, legado especial para la ocasión, consagró las familias del mundo al Sagrado Corazón de Jesús. Soy consciente de que a nuestra actual sociedad, profundamente secularizada, este hecho le merece poca atención -y hasta es posible que poco respeto-, y por ello, quiero recordar algunos apuntes históricos al respecto. La devoción al Sagrado Corazón de Jesús nace en Paray-le-Monial (Francia) en la segunda mitad del s. XVII. En aquella Francia con la piedad y religiosidad popular atenazada por la herejía jansenista y con el racionalismo cartesiano sentando las bases del relativismo actual al afirmar que las cosas no son lo que son sino lo que yo pienso que son, Jesús se revela a santa Margarita María justo un siglo antes de la revolución francesa y le pide la consagración de Francia a su Sagrado Corazón en la persona de Luis XIV. Esa consagración nunca se efectuó. Vendrá después la Virgen en Fátima, a principios del s. XX, durante la Primera Guerra Mundial y en pleno "octubre rojo" de 1917. A la vidente Lucía de Fátima, le pedirá la consagración de Rusia a su Inmaculado Corazón por medio del Papa, prometiendo la salvación de ese país y evitar la que después sería Segunda Guerra Mundial. Si la Consagración de Francia al Sagrado Corazón no se efectuó como fue pedida, sí lo fue la consagración del Mundo por parte del Papa León XIII en 1899. La segunda se efectuó en su plenitud por Juan Pablo II, en Roma, en 1984, tras el atentado sufrido de manos de Alí Agca el día de la Virgen de Fátima de 1981.
Por último, en vísperas de la Segunda Guerra Mundial, el Señor se revelará en diversas ocasiones a Santa Faustina Kowalska, con su Corazón abierto, para revelarle el atributo divino por excelencia para los tiempos actuales: la Divina Misericordia. Juan Pablo II consagró el mundo a la Divina Misericordia el 17 de agosto de 2002 en el Santuario Mundial de Cracovia.
El Templo del Sagrado Corazón del Tibidabo junto al Santuario Nacional de la Gran Promesa de Valladolid y el del Cerro de los Ángeles de Madrid, constituyen la concreción especial de la promesa efectuada al Padre jesuita Bernardo de Hoyos en 1733 sobre el reinado de Cristo en España con más intensidad que en otros lugares. Por su parte, el Templo del Tibidabo, expiatorio por referencia a la Semana Trágica, promovido por san Juan Bosco, se instituyó como Templo Nacional del Sagrado Corazón para ser en España el equivalente al Sacre-Coeur de París para Francia.
Por ello, la consagración mundial efectuada el pasado domingo por persona tan relevante de la jerarquía de la Iglesia y en ocasión y lugar tan señalados, merece ser destacada. Es una auténtica fuente de esperanza para la familia en el mundo de hoy.
Jorge Fernández Díaz
Diputado al Congreso por Barcelona