PREGUNTA AL MINISTRO DE JUSTICIA. Pleno del Congreso de los Diputados, 21 de marzo de 2007
El señor FERNÁNDEZ DÍAZ: Gracias, señor presidente. Señor ministro, el señor Zapatero dijo que el Estatuto de Cataluña iba a dar estabilidad y resolver el encaje de Cataluña en el conjunto de España durante por lo menos una generación, veinticinco años. Está pendiente de pronunciarse el Tribunal Constitucional y ya vemos que sus socios hablan abiertamente de que el actual sistema es insostenible y plantean abiertamente que el punto de llegada es un Estado propio para Cataluña. Ni un año ha durado la solución definitiva que planteaba el señor Zapatero. Esta es la calma fructífera que dijo que iba a traer el Estatuto. Para ello ha roto el consenso de la transición, ha debilitado al Estado y están forzando a las instituciones solo para contentar a unos socios que, como vemos, no han renunciado ni a uno solo de sus objetivos máximos. La debilidad que ustedes están mostrando en este asunto y en otros es provocativa, y por eso sus socios ya no tienen ni siquiera recato en hablar desde elevadas responsabilidades institucionales y sin ningún tipo de pudor de que la única salida que les queda es, dada la situación existente, el Estado propio catalán. Ante esta situación, le formulo la pregunta que consta en el orden
del día. (Aplausos.)
El señor PRESIDENTE: Señor ministro, su turno.
El señor MINISTRO DE JUSTICIA (Fernández Bermejo): Gracias, señor presidente. Señoría, el Gobierno tiene un enorme respeto por la libertad de opinión, de expresión y de ideario político de cualquier líder, siempre que se exprese por cauces democráticos. Tiene por norma también no comentar ni responder las opiniones de los miembros de los gobiernos
autonómicos. En todo caso, como sabe S.S., el Gobierno defiende el modelo constitucional que nació en el momento en que aprobamos la Constitución, que está dando el fruto que usted ve, y seguiremos defendiéndolo. Gracias. (Aplausos.)
El señor PRESIDENTE: Señor Fernández Díaz.
El señor FERNÁNDEZ DÍAZ: Sí, señor ministro, pero estaremos de acuerdo en que no es lo mismo que hable un líder del partido y como dirigente del partido a que lo haga el vicepresidente de la Generalitat de Cataluña. La lealtad institucional y la lealtad constitucional no vinculan de la misma manera a una persona cuando habla desde una posición que cuando habla desde otra. Le recuerdo que esa institución la preside, la gobierna y la dirige el Partido Socialista. Sus socios, señor ministro, han entendido muy bien una frase que dice: Cuando no se sabe hacer política de Estado se hace política con el Estado. No sé si a usted le suena, señor ministro, pero le
digo quién la pronunció: el señor Rodríguez Zapatero. ¿Qué le parece? Sus socios lo han descubierto. El señor Rodríguez Zapatero, como al parecer no sabe hacer política de Estado, está haciendo política con el Estado. Ha puesto en cuestión el modelo de Estado y se ha lanzado
a una aventura con quienes precisamente creen que el Estado español les sobra para llevar a cabo sus delirios identitarios. Por eso callan, por ejemplo, ante la deriva del oasis catalán, donde por cierto ahora en vez de cristales rotos tenemos caceroladas y donde el aparato de propaganda de la Generalidad se dedica a amenazar a los periodistas que incomodan. Señor ministro, le pido formalmente que trabaje para garantizar la igualdad de derechos y libertades de todos los ciudadanos españoles en todo el Estado español, también en Cataluña. (Aplausos.)
El señor PRESIDENTE: Su turno, señor ministro.
El señor MINISTRO DE JUSTICIA (Fernández Bermejo): Señoría, le reitero que el respeto a las opiniones es una de las guías de este Gobierno, el respeto a las opiniones de los líderes, que son muy libres de decir lo que estimen pertinente, pero lo que importa es la conducta de las instituciones, es el sistema de relaciones estable que hemos conseguido en este país desde 1978, esa normal relación que supone que todos trabajamos para que este país sea de verdad tal y como nos ven fuera. ¿Sabe cómo nos ven? Nos ven como un país en alza, un país en muy buena medida envidiable. ¿Saben lo que les llama la atención? Que en un país en el que la economía va como va, en el que el sistema autonómico funciona como funciona y en el que cada una de las administraciones hace lo que tiene que hacer para que los ciudadanos sean felices, exista sin embargo una oposición echada al monte (Rumores.) que lo único que ve es catástrofe y que practica no ya la debilidad, como usted dice, sino el catastrofismo más absoluto, que no es entendido en parte alguna. No es que hagan ustedes política con el Estado, es que hacen política en los terrenos en que nunca debieron hacerla, por ejemplo en el del terrorismo
—yo les comprendo—, porque no tienen otro bocado que llevarse a la boca. Lo lamento por
ustedes pero España es de otra manera. (Aplausos.)
0 comentarios:
Publicar un comentario
Suscribirse a Enviar comentarios [Atom]
<< Inicio